El uso de dispositivos de e-movilidad como e-bikes, e-scooters y hoverboards se disparó a raíz de la pandemia, y la variedad de popularidad de los vehículos eléctricos e híbridos enchufables también va en aumento. Tanto si se trata de una e-bike como de un vehículo eléctrico, la energía de las baterías de iones de litio los impulsa.
Las baterías de iones de litio forman parte de la solución energética limpia, pero pueden provocar incendios violentos y rápidos si están dañadas, son falsas o ignoran las normas de seguridad.
Sin embargo, una nueva encuesta de UL Standards & Engagement realizada a 2.034 adultos estadounidenses indica que sólo 25% de los encuestados comprueban si los productos que compran cumplen las normas sobre baterías de iones de litio. Peor aún, 43% de los propietarios de bicicletas eléctricas desconocen qué es lo que alimenta sus dispositivos. Es un vacío de información que puede tener consecuencias mortales.
